Pleca
La pleca o barra vertical (|) es un carácter que consiste en una raya vertical. Es muy usada en matemáticas para representar el valor absoluto, el módulo, determinantes, como símbolo de "tal que" o "que cumple" y con índices como símbolo de rango; en lexicografía, para separar acepciones y subacepciones; y, en informática, como operador de disyunción "o" (or) o para tuberías. En este último caso, también se denomina al carácter, por extensión, tubería.
Los diccionarios DRAE, DUE, el Diccionario de uso de Manuel Seco y el Diccionario Ilustrado de Larousse definen pleca como
- Filete pequeño y de una sola raya
Esta definición tal vez sea algo imprecisa. Algo más concreto es el Diccionario Clave1 que la define como
En imprenta, signo gráfico formado por una línea y que se usa generalmente para separar distintas partes de un texto.
Usos:
- En imprenta se ha usado en posición horizontal debajo de un título, o bien para separar dos textos.
- En lexicografía, a la hora de elaborar diccionarios, lexicones, etc. para separar subacepciones, cuando las acepciones ya están separadas por una pleca doble.
- Alguna vez, si es necesario, puede funcionar como sustituto de la barra (/) en la disposición de versos en línea.
- En informática, se utiliza el símbolo | para designar a las tuberías (pipe).
- En lenguaje wiki, se usa dentro de un vínculo interno (doble corchete) para que muestre otro texto distinto del título de la página a que dirige. Por ejemplo, si en Wikipedia se escribe [[Perro|Can]], el enlace aparecerá con el texto "Can", pero redirigirá a la página ''http://es.wikipedia.org/wiki/Perro''.
Cedilla
Una cedilla es un gancho o cola ( ¸ ) añadida bajo ciertas letras como una marca diacrítica para marcar un cambio en la pronunciación. En catalán, francés y portugués, se utiliza solo debajo de la letra c y de toda esa letra (ç), y en esos casos se llama respectivamente c trencada, c cédille, y c cedilha.
Origen
La cedilla se originó en España como la mitad inferior de una z cursiva miniatura. La palabra “cedilla” es el diminutivo del nombre castellano antiguo de esta letra, la ceda (zeta). El gallego y el castellano moderno, sin embargo, ya no utilizan este diacrítico, aunque sí se usa en portugués, catalán, occitano, y francés, bajo la letra c, y bajo diversas letras en otras lenguas.
Virgulilla
La virgulilla es un signo ortográfico en forma de coma, rasguillo o trazo. La virgulilla generalmente es identificada como la tilde de la eñe o virgulilla de la eñe1 (~), aunque la Real Academia Española acepta también como ejemplos de virgulilla el apóstrofo (’), la cedilla (¸), y el acento agudo (´). Las palabras «tilde» y «virgulilla» se pueden referir a cualquier trazo, aunque sin embargo, el contexto puede indicar si específicamente se alude o no al signo aquí referido, o sea a (~).
Acento circunflejo (^)
 | â |
Ê | ê |
Î | î |
Ô | ô |
Û | û |
El acento circunflejo (^) es un signo diacrítico utilizado en la ortografía normal de diversas lenguas: francés, español medieval, portugués, rumano, neerlandés, noruego, galés, eslovaco, griego, esperanto, vietnamita, ligur, friulano, barese y siciliano entre otros. También es utilizado comúnmente en varios esquemas de transcripción y romanización. Su nombre proviene del latín circumflexus (plegado circularmente), que es una traducción del griego περισπωμένη (perispōménē).
En general este acento se usa sobre las vocales (â, ê, î, ô, û). En la ortografía del esperanto, en cambio, se coloca sobre consonantes por ejemplo:(sûenin)ĉ, ĝ, ĥ, ĵ y ŝ.
Uso del acento circunflejo por idioma
En griego antiguo
En el idioma griego antiguo (en este idioma, el signo no es ^, sino ~) el signo comparable al circunflejo puede aparecer en una vocal larga de la última o de la penúltima sílaba de cualquier vocablo o palabra, sin embargo en tal caso la última sílaba debe ser breve.
Con base en la posición de este acento una palabra es llamada perispómena (sobre la última sílaba) o properispómena (sobre la penúltima sílaba).
Con base en la posición de este acento una palabra es llamada perispómena (sobre la última sílaba) o properispómena (sobre la penúltima sílaba).
En español
El signo, introducido por la Real Academia en el siglo XVIII, se añadía a la vocales posteriores a ch y x, y señalaba que estas se pronunciaban [k] y [ks] respectivamente, ya que tales palabras eran préstamos del latín o del griego. Ejemplos: châracteres, exâcto. Sin embargo, si el uso de este acento contradecía el uso del acento agudo, se le daba prioridad al segundo: chímica (y no chîmica). También, si una palabra terminaba en x, no se marcaba su pronunciación [x] en ninguna vocal cercana al no ser seguida de vocal: relox (hoy: reloj). En los primeros textos, el circunflejo podía alternar con el grave en usos similares (â, cargarâ, despachô) o utilizarse en voces como fê o vêr para indicar la presencia original de una doble vocal (fee, veer; hoy: fe, ver). También podía aparecer en palabras como baxîos, traîa, tenîa, oîa (en estas últimas, indicaba un hiato o ruptura del diptongo), recordando su empleo en griego con palabras con estas mismas terminaciones. El acento agudo se usaba raramente y casi siempre en posición interior de palabra. No obstante las tendencias descritas, hay que señalar que, en esa primera época, el uso de los diferentes tipos de acento era, por lo general, irregular e inconsistente incluso dentro de una misma obra.
Este signo (^) luego fue abandonado rápidamente en el mismo siglo, después de que el uso de ch con pronunciación [k] y de x con pronunciación [x] se abandonaran a favor de c/qu y j/g (como en relox o dixe), volviéndolo de nula utilidad.
En italiano[editar]
En la actualidad, en italiano, el circunflejo prácticamente está en desuso, aunque normativamente se acepta su uso. Antiguamente el circunflejo podía ser puesto sobre cualquier vocal e indicaba las formas contractas típicas del lenguaje poético debido a la elisión de una sílaba por razones de métrica.
En francés[editar]
Como en español y otros idiomas, el signo circunflejo supone una extensión de la vocal que lo porta, filológicamente suele indicar la contracción debida a la pérdida de una < s > preconsonática en el latín, por ejemplo en chastel→ chasteau → château (castillo); o en isle → île (isla).
En portugués[editar]
En portugués, se utiliza en â, ê y ô. Los dos últimos muestran las vocales medias cerradas tónicas [e] y [o]. La â (siempre antes de una consonante nasal - m o n: pântano, câmara) denota una vocal tónica central, ligeramente nasalizada en portugués hablado en Brasil. Utilizado al término de las palabras con e cuando está cerrada: "você" (usted), "lê" (lees/lee), jurerê (jureré, la playa de). A veces se utiliza para distinguir algunas palabras, tales como "tem" (tiene) y "têm" (tienen).
En el portugués de Brasil el circunflejo tiene en e y o su uso más frecuente, por razón de la pronunciación cerrada o nasalizada de las vocales que en portugués lusitano: bebê/bebé (bebé), Antônio/António (Antonio), econômico/económico (económico), prêmio/prémio (premio), tênis/ténis (tenis). Pero en portugués europeo hay también ese sonido, como en estômago (estómago) y fêmea (hembra). En cuanto a â, se utiliza igual en todas las variantes de portugués.
En avañe'ẽ (guaraní)[editar]
En avañe'ẽ se utiliza el tilde circunflejo para pronunciaciones alternativas de la i (que se pronuncia como la /i/ española), por un lado como indicador de guturalización del sonido, siendo muy común la utilización de la î como variante guturalizada, y también como indicador de naso-guturalización en la ŷ. Existen controversias sobre la utilización de estas letras debido a las variaciones en el achegetî/achegety (abecedario avañe'ẽ) entre diferentes regiones avañe'ẽ-parlantes, siendo sustituidas la î por la y y la ŷ por la ỹ, correspondientemente.
&
El signo &, cuyo nombre en español es et,1 es una alternativa gráfica de la conjunción copulativa latina et, de la que deriva la conjunción española «y», que es lo que significa.
Es conocido también por su nombre en inglés ampersand, proveniente a su vez de la expresión and per se and, es decir, «y por sí mismo, y», antiguamente usada como parte de la retahíla para la memorización del alfabeto.[cita requerida]
Deriva del latín de donde el signo pasó a diversos idiomas, incluido el español. Su uso en esta lengua es superfluo, pues no resulta económico (a diferencia de otros idiomas) ya que la conjunción copulativa y tiene una grafía más breve y sencilla. En textos españoles antiguos es frecuente encontrarlo empleado en la expresión latina adoptada et cetera, en las formas &c. o &cetera.
Un uso extendido es el que persiste en la bibliografía académica en inglés, en la enumeración de los autores, incluidas la expresión como & al. (del latín et alii, plural masculino, o et alia, plural neutro) que se traduce como «y otros».
Como se observa en la lista de letras de Byrhtferð (año 1011), este signo «&» fue considerado a menudo como una letra más al final del alfabeto latino.
El signo en sí es una ligadura —combinación de diseño de dos letras en un único grafema, usado primero para aumentar la velocidad de la escritura manual— desarrollada por Marco Tulio Tirón, secretario del gran orador romano Cicerón. Para poder registrar los discursos y la correspondencia dictada por este último, Tiro, que era un esclavo liberto, inventó varias formas de acelerar la escritura, siendo por ello considerado el padre de la taquigrafía. En la Edad Media o en los primeros tiempos de la imprenta el uso de ligaduras era muy común, en este caso por la economía de espacio, cuando la materia prima —pergamino o papel— añadía mucho al precio de los libros.
También se le conoce como signo tironiano.